Desde la frase «ver más allá del horizonte», se plantea la recomendación de mirar a las estrellas y meditar sobre nosotros mismos, y ese cuestionamiento puede ayudar a nuestras mentes a mantenerse curiosas y por ende, saludables.

¿Hace cuánto no miras las estrellas?

Mirar a las estrellas pareciera casi un lujo en la actualidad, donde al momento de llegar el atardecer nuestras tareas parecen ir contrareloj para finalizar todo a tiempo y poder conciliar un buen descanso y prepararnos para un nuevo día lleno de actividades.

Algo que de niños nos enseñaron y que hoy posiblemente sólo hacemos cuando vamos de vacaciones donde tenemos tiempo para descansar, ver las estrellas se convierte en un momento especial en que nuestras mentes parecieran viajar junto con ellas.

Observar el estrellato es una práctica que beneficia a nuestra salud mental, ya que nos exige desconectarnos de la ciudad para salir a un cielo más despejado y conectarnos con un entorno más natural lejos de las luces de los edificios, autos y anuncios a los que estamos acostumbrados. Además al llevar a cabo esta práctica, resulta en automático el guardar un momento de silencio, lo que conduce a nuestra mente a un estado de relajación.

Recomendado por Stephen Hawking

Quien fuera un verdadero genio y además estudioso del espacio, Stephen Hawking alguna vez dijo: “Mira a las estrellas y no a tus pies”, que se hiciera famosa y fuera adoptada por muchos para incentivar una visión más amplia. Aunque la frase completa también incluiría lo siguiente: “Intenta entender lo que ves y pregúntate, qué hace que el universo exista. Sé curioso. Y por más difícil que parezca la vida, siempre habrá algo en lo que puedas ser exitoso. Lo que importa es que tan sólo no te des por vencido.”

Indudablemente hablar de “mirar a las estrellas” desde esta perspectiva se trata de una metáfora donde la primicia es abrir la mente para ver más allá y buscar nuevos horizontes en nuestras vidas. Pero, retomando este tema, se han llevado a cabo diversas investigaciones para demostrar los benficios de ser curiosos. Por ejemplo, un estudio de la George Mason University en Virginia, solicitó a sus estudiantes llenar una serie de cuestionarios de personalidad durante tres semanas, descubriendo que aquellos cuyos puntos en curiosidad eran altos, también lo eran en cuestión de mirar más allá de sí mismos y de disfrutar más la vida, resultando en personas con un mejor sentido del bienestar.

Ya sea como consejo de vida o de forma literal, hazlo, mirar hacia las estrellas más seguido te hará más feliz y mentalmente más sano.