El futuro es digital, no es un secreto para nadie y que, más bien, ya es nuestro presente. Lo que pocos saben son los alcances de esta era digital, ya que se incorporarán cada vez más en nuestras vidas en formas que aún no imaginamos, pero que en ocasiones pueden representar una gran oportunidad. Es el caso de la economía digital en Latinoamérica.
Con la llegada de internet y con el acceso cada vez mayor a esta tecnología es que han comenzado a surgir nuevas formas y hábitos de consumo que permean en la economía; de estos se derivan nuevas formas de negocio con enfoques en redes sociales, e-commerce, publicidad en internet, pagos online, tiendas de aplicaciones, e-learning y servicios virtuales. Nuevas tecnologías se aproximan para dar pasos agigantados de esta índole, como vemos en la nota: ¿Qué es 5g y cómo cambiará tu vida en los próximos años?
En este 2020 la economía del mundo se ha visto menguada por la contingencia sanitaria; sin embargo, esto ha sido un factor de aceleración para la transición al mundo digital, lo cual permitirá que lleguen a más personas y se permita incluir a un crecimiento incluyente, con la esperanza de lograr que sea sostenible. Todos estos nuevos modelos habilitan posibilidades de crecimiento a regiones como la nuestra, pues con la llegada del teletrabajo se permite reducir las brechas que existen entre los trabajadores y las empresas, estudiantes y escuelas.
Riesgos de la economía digital
Esta podría ser un arma de doble filo si su acceso no se generaliza, ya que promueve la desigualdad y excluye a todos los que no se unan a este camino digital. Otro de los problemas es que llegarán muchos procesos automáticos que eliminarán algunas labores que podían ser realizadas casi por cualquier persona, como conducir un taxi. Con esto podrían surgir una categoría para aquellos que no pueden desempeñar ninguna labor.
¿Es una buena oportunidad para Latinoamérica?
Los nuevos modelos de comercio y consumo que comenzarán a implementarse en toda la zona latinoamericana propiciarán un cambio en toda la cadena de valor y en los ecosistemas de producción, por lo que surgirán nuevas oportunidades para superar la crisis que se está generando con la contingencia. Aunque ya se implementan ciertos modelos en algunas ciudades, esto es sólo el comienzo de la que podría ser un gran avance Latinoamérica.
Para que esta sea una oportunidad real de crecimiento y vinculación para nuestros países en desarrollo, será necesario que las nuevas generaciones comiencen una etapa de “climatización digital” desde que son pequeños, con la finalidad de que adquieran las competencias digitales; sin embargo, la incorporación de estos modelos es una labor que debe realizar la generación actual.
Se vislumbra un futuro próspero para la región: Un mundo cero emisiones traería 15 millones de empleos a Latinoamérica.
