Skip to main content

Sus altas montañas, sus imponentes castillos, su arquitectura única, sus espectaculares paisajes verdes, sus carreteras que te dejarán sin habla y su enriquecedora historia, son tan sólo alguno de todo lo maravilloso que hay para ver y valorar en Escocia. Por ello, los lectores de la reconocida editorial de viajes británica Rough Guides, respondieron a una encuesta lanzada para seleccionar al país más bonito del mundo, resultando Escocia el gran ganador. Entre otros de los países más votados fueron: Nueva Zelanda (2°), Canadá (3°), Italia (4°), Islandia (8°), EUA (9°), México (12°), India (13°), Suiza (15°), Perú (16°), etc.

Edimburgo (capital escocesa) fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1995, por eso y por lo antes ya mencionado, resulta la segunda ciudad más visitada de Reino Unido (después de Londres). Acá te compartimos un poquito de lo que hay, para que te decidas a descubrirlo en persona; esperemos que muy pronto.

Highlands, o bien, Las Tierras Altas, son valles interminables de castillos y montañas que se vuelven un agasajo a la vista y aunque las fotos que existen de estos lugares son impresionantes, ninguna le hace justicia, por eso vale la pena ver todo en vivo.

Si estás por ahí, date una vuelta al Lago Ness, famoso por la leyenda de “Nessie”, el monstruo que vive en él. No te preocupes si no lo ves (te prometemos que no serás el único), ya que el paisaje que rodea a este lago será suficiente para pensar que el viaje ha valido totalmente la pena.

Ya encarrerados, sigamos el recorrido en auto, a Glencoe, uno de los lugares más deslumbrantes de esta zona, tanto, que películas como Harry Potter y James Bond han sido grabadas aquí.

Sus paisajes son hermosos sin importar la temporada que se esté viviendo. Ya sea que vayas en invierno donde el blanco se apodera de sus montañas y hasta puedes esquiar, o en verano cuando el verde está en todo su esplendor. Sus riachuelos te invitan a la relajación y que su fauna, como los venados, disfrutan armoniosamente a sus alrededores.

Y bueno, como no es Escocia si no hay castillos, obvio tienes que darte una vuelta por el Castillo de Edimburgo, el castillo de Craigmillar (aquí se rodó parte de Outlander), el Castillo de Tantallon (que tiene una vista espectacular al mar), el Castillo de Stirling, y si incluso quieres hospedarte en uno y sentirte parte de la realeza, ve al Castillo de Dalhousie, el cual fue convertido en hotel.

Estos castillos además de guardar grandes historias, guardan también entre sus pasillos… ¡fantasmas! Lo que los hace aún más interesantes de conocer.

¿Cuándo empiezas a buscar vuelos?

 

Leave a Reply