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No solamente se trata de evidenciar los mejores destinos del mundo para visitar, también hay que dar las razones de por qué es bueno y ¡sano!, viajar de forma recreativa al menos una vez al año, a donde quiera que sea.

Dicen que por su salud, los hombres deben salir con sus amigos al menos dos veces por semana. Así que bien podrías decir que tomarte una cerveza, ver un partido de fútbol o simplemente sentarte a platicar con ellos, es casi recomendado por el médico. Nosotros, creemos que a eso hay que agregarle que para una buena, o más bien una excelente salud, también debes viajar –ya sea con amigos, pareja, familia o solo- por lo menos una vez en el año.

¿Por qué? Porque cuando viajas no sólo te relajas y rompes la rutina y estás mucho más dispuesto a abrir tu mente, también convives y conoces otras culturas, sus costumbres, su idioma, su historia, y esas son cosas que si bien podrías leer en libros -o mucho más rápido- googlear en internet para empaparte de conocimiento, todas esos descubrimientos nunca se van a comparar si se disfrutan con la experiencia en primera persona, es decir, no hay nada como que algo totalmente desconocido te llame la atención y vayas y lo descubras tú mismo, que lo sientas, huelas, mires, pruebes y escuches.

Nunca va a ser lo mismo googlear el templo de Angkor Wat en Camboya y sorprenderse de su belleza en una foto, que ver su majestuosidad de frente y descubrir por qué es considerada la mayor construcción religiosa en el mundo.

Lo mismo si buscas Petra, en Jordania, y descubres que es una de las ciudades más antiguas, ubicada en el desierto con impresionantes construcciones de piedra, pero que si la visitas en vivo te darás cuenta que ninguna foto le hace justicia a lo imponente de esas edificaciones y a sus colores.

Porque no es lo mismo compartir un artículo que diga “5 lugares que debes visitar antes de morir”, a compartir la experiencia de haber visitado ya ciertos lugares y poder recomendarle tú mismo a la gente qué hacer, dónde comer, cuánto gastar, y sobre todo ¡salir en las fotos!, y poder explicar lo que se ve en ellas, pero principalmente recordar lo que esa experiencia te dejó.

Viajar te brinda tema de conversación, te vuelve más independiente y al mismo tiempo te cambia la forma de ver la vida; porque ¿qué tal que en tu próximo viaje te das cuenta que te ha gustado tanto Vang Vieng en Laos, que te gustaría vivir en ella, y decides buscar un trabajo allí mismo?, ¿qué tal que te enamoras de alguien en tu visita al monte Saint Michel en Francia y deciden empezar una nueva vida ahí o en cualquier otro lugar del mundo?, ¿y si te das cuenta que la vida puede ser corta y decides pasar el resto de tu tiempo viajando?, ¿qué pasa si regresas con una nueva perspectiva y decides por fin alejarte de todo eso que no le hace bien a tu existencia?, o simple y tranquilamente ¿te molestaría regresar de un viaje siendo más feliz?

También puede que no pase nada y solo regreses con una nueva experiencia y el descanso de haber estado en un nuevo lugar, pero eso ¡también está increíble! Y definitivamente los doctores deberían recetarlo al menos una vez al año.

 

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