Su ubicación es maravillosa, su arquitectura espectacular, caminar entre sus jardines y mirar la vista que ofrece de la ciudad proporciona una tranquilidad extraordinaria, y lo mejor es que la palabra “incluyente” es lo que más lo caracteriza (no por nada es uno de los lugares más visitados de todo Santiago de Chile.

Este lugar se inauguró en 2016 debido a que una gran mayoría de chilenos comenzó a optar por sus enseñanzas, ¿y cuáles son esas enseñanzas? Según Bahá’u’lláh, fundador de la Fe Bahá’í, los templos bahá’ís se conciben como espacios de oración, razón por la cual en ellos no se realizan ritos, ceremonias o sermones.

En su interior no hay imágenes ni figuras y cualquier persona, sea cual sea su creencia, puede visitar el lugar. En las paredes interiores del Templo en Santiago pueden leerse nueve extractos breves de los escritos de Bahá’u’lláh, y en el ápice de la cúpula se observa una representación caligráfica en árabe del texto “Oh Tú, Gloria del Más Glorioso”.

Tiene una forma única que consiste en 30 metros de altura y 9 partes que cubren su base circular, son 9 partes porque este número es el dígito más alto que existe en nuestra numeración, por lo que los bahá’ís lo ven como un símbolo de plenitud y perfección. Dichas partes fueron elaboradas con vidrio y mármol translúcido, lo que permite que su iluminación durante el día sea completamente natural, haciéndolo un lugar aún más acogedor.

Incluso esta obra arquitectónica creada por la oficina de arquitectos Hariri Pontarini Architects de Toronto, Canadá, ha sido reconocida con varios premios, entre ellos el Premio Internacional de Arquitectura, otorgado por el Museo de Arquitectura y Diseño de EE.UU., en 2017, por lo que ya te imaginarás por qué vale la pena conocerlo en persona.

Adentro del Templo las fotografías están prohibidas, y para asistir no necesitas hacer citas sino acudir dentro del horario en el que está abierto al público, el cual es de martes a domingo (solamente cierran los lunes y días feriados), y la entrada es totalmente gratuita.

Y no te preocupes, no necesitas ser parte de esta creencia para poder visitarlo, como lo dijimos, sus templos se caracterizan por ser incluyentes y ofrecer un espacio de paz y convivencia para todas las personas. Además, se trata de un pequeño escape de la ciudad para despejar la mente.