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Imagen: The New York Times

¿Qué son los NFT?

“Más vale nadar a hundirse como piedra” nos dice Bob Dylan en su canción The Times They Are A-Changin’. Cuando el internet empezó fue catalogado como una herramienta de diversión, algo que solo se convertiría en un extra en nuestras vidas. Pero al igual que sus parientes lejanos la TV y la radio, con el paso del tiempo el internet no solo se convirtió en algo divertido, también en algo que cambiaría el rumbo de las cosas por siempre.

En este enorme World Wide Web llamado así por su nombre informático, creamos, compartimos, compramos y vendemos lo que queremos. ¿Pero cuáles son sus límites? ¿Hasta dónde podría llegar todo esto que creamos y compartimos en la web?

Hoy hablaremos de los NFT y cómo a principios del año pasado empezaron a darle vuelta al comercio en línea cambiando las reglas de la compra-venta online.

Para empezar definamos que significa NFT. Por sus siglas en inglés NFT significa Not Fungible Token o Token No Fungible en español. Un token es un proceso que disfraza de forma temporal datos que podrían ser sensibles o importantes de robar y la palabra fungible hace alusión a aquellos bienes considerados en el tráfico jurídico en función de su número, medida o peso y pueden ser sustituidos por otros. Sin embargo, si algo no es fungible eso es imposible ya que tiene unas propiedades únicas, por lo que no puede ser intercambiado.

¿Pero qué es? Un NFT es un token que funciona únicamente para algo específico, pongamos un ejemplo: con una moneda de cambio normal tú puedes recibir dos unidades de cincuenta para formar cien o tal vez diez unidades de diez para formar también cien. Un NFT por ser no fungible no puede ser dividido o intercambiado, es único y especial como un recuerdo o tus huellas digitales.

Los NFTs fueron creados como un activo para resguardar la autenticidad de las obras de autor. Es decir, puede haber millones de prints y reproducciones de la Mona Lisa pero por más exactas que sean, nunca serán la Mona Lisa original.

Pero bueno, si en estos momentos mencionamos a Zoë Roth es claro que no nos llega alguien importante a la cabeza, pero Zoë se volvió famosa a la edad de cuatro años por una foto tomada por su padre cuando una casa del vecindario se incendiaba. Mientras Zoë era testigo del acto, su padre le dijo que volteara a la cámara y en ese momento plasmó la fotografía que se convertiría en un fenómeno mundial, el meme Disaster Girl.

La imagen Disaster Girl fue reproducida millones de veces a lo largo de los años y guardada en incontables ordenadores alrededor del mundo, pero fue hasta el año pasado que Zoë decidió darle un giro a todo esto.

Roth puso a la venta la copia original de su famosa foto como un NFT a un precio de medio millón de dólares y fue comprada a $495,000 USD. Zoë logró también quedarse con los derechos originales de su imagen y recibir el 10% de las ventas al ser usada por alguna marca grande.

Ahora miles de autores y creadores de contenido han empezado a registrar sus obras digitales como NFTs, abriendo un mundo de posibilidades en temas de registro de propiedad intelectual de contenido por internet y creando una nueva forma de comercio en línea.

¿Y tú qué registrarías? Nunca sabes cuando un video gracioso de la preparatoria o un dibujo hecho extraordinariamente en paint podría volverte millonario.

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